Decimoquinto partido de Liga del equipo Juvenil, en el que viajamos hasta Coslada con fantasmas en la cabeza recordando el 0-3 de la ida. Nos enfrentábamos a un equipo sólido y con un buen plantel pero que con una racha de resultados inconsistentes.
Comenzó la primera parte. El buen estar y la solidaridad de nuestro equipo hizo que, conectando varias combinaciones de pases ello resultara en ocasiones peligrosas sobre la portería del Coslada. Tras varios intentos de cambiar el marcador y después de dominar el balón en los primeros compases del partido, el primer gol llegó desde la bota derecha de Bullido, que logró una vaselina allí donde el portero no pudo alcanzar. Posteriormente, David Abad condujo el balón entre tres jugadores y encarando al portero, al que, con un sutil movimiento, le ganó la partida marcando nuestro segundo gol. Antes de finalizar la que posiblemente haya sido la mejor primera parte de toda la temporada, un pase elevado cae en el pecho de Bullido que con un control orientado hacia dentro, cogió su mejor perfil y encañonó la escuadra de la portería rival. Y así llegó el descanso.
La segunda parte comenzó y continuó siendo disputada con intensidad por parte de ambos equipos, ya que ninguno quería bajar el ritmo. El CD Coslada salió con mucho ánimo, presionando cada balón e intentando transformar el cero de su marcador. Nuestro equipo supo mantener el ritmo del partido a duras penas y el Coslada aprovechó para recortar un gol en el marcador después de una internada por nuestro flanco derecho. Y a más de uno se le pusieron los pelos de punta cuando el Coslada recortó un nuevo gol tras un buen contraataque. Una chilena de Donaire podría haber dado el estacazo final al encuentro, pero no pudo ser, y, con todo, los tres puntos viajaron a Rivas.
“Con una sensación de estar haciendo bien el trabajo, nos llevamos tres puntos que nos ayudan a creer un poco más en estar arriba habiendo demostrado que podemos hacer muy buen futbol”, explicó Raúl Yanci al final del encuentro